29 junio 2008

nueva vida


La vida da muchas vueltas, algunas son absolutamente eseradas, hasta anheladas. Otras nos esperan al dar vuelta una esquina y darnos cuenta que entramos en un laberinto de dudas y conflictos, sin ver la luz que nos muestre una salida.
Cuando llegamos a este punto sólo tenemos dos caminos, y una salida rápida. Puedes decidir quedarte ahi, donde te sientes más seguro de que nunca va a apsar nada que no haya paado ya, que no conzcas ni que te asuste, decidir que no vale la pena arriesgarte a lo desconocido y que tu vida llego hasta ahi, seguiras viviendo tal cual hasata ese día sin importarte que puede haber más allá del recodo.
Puedes optar por salirte del camino, por lo que lo que quedó atr+as no te gusta y lo que puede venir te asuste, aunque ahi hay sólo una salida, la muerte.
Y puedes tomar la decisión de seguir adelante, tragarte los miedos y derramar las lagrimas que te correspondan, pero no dejar que te paralicen, que los dolores no te quiebren, que las penas no te ahoguen y las rabias no te destruyan... Nadie dijo que el camino es facil, nadie dijo que no va a doler, pero algún día, para algunos pronto, para otras es un lejano mañana, nos daremos vuelta y diremos: -valio la pena, coseche en mi vida amigos, conocimiento y sabiduría. Supe dar amor y recibirlo, supe de respetar y ser respetado, supe del llanto y de la derrota, pero también de la risa y del triunfo. Cuando un pie me hizo una zancadilla, una mano me ayudó a levantarme, valio la pena mi vida, no fui una mera cascara que respira, fui un hombre (o mujer), a imagen y semejanza de Dios, con un espíritru fuerte y amante q supo crecer para Su Gloria, que es también la nuestra.